El hombre es una especie animal del planeta tierra
cuya conducta responde a la satisfacción de sus necesidades y cuya limitada
existencia individual le plantea el reto de lograr su total desarrollo y
satisfacción. Precisamente, la educación es parte de su necesidad; tal como lo
plantea Frank (2004) “la experiencia de aprendizaje aumenten la probabilidad de
que un futuro próximo para que el hombre viva plenamente, no solo como
individuo de excepción sino como un conglomerado consciente y responsable de
sus acciones” (p.14).
De este modo, la educación forma parte no sólo una
necesidad sino de la experiencia más grata para la construcción futura de la
especie humana consolidando esta en las perspectivas de evolución; respondiendo
la insaciable demanda de formación, pues ahora en día no sólo basta con que
cada individuo acumule al comienzo de su vida una reserva de conocimientos a la
que podrá recurrir después sin límites sino que actualice, profundice, enriquezca
ese primer saber adaptándose a un mundo en permanente cambio.
Para todo ello, es necesario que el proceso
educativo integre lineamientos que persistan en la valoración de esta
perspectivas aunando fortalezas en distintos planos que establezcan el valor de
los cuatro aprendizajes fundamentales propicios para el transcurso de la vida y
que consolidan el conocimiento como lo son aprender a conocer, es decir,
adquirir los instrumentos de la comprensión; aprender a hacer, para poder
influir sobre el propio entorno; aprender a vivir juntos, para participar y
cooperar con los demás en todas las actividades humanas; por último, aprender a
ser, proceso fundamental que recoge elementos de los tres anteriores (Delors; 2000).
De acuerdo a ello, el aprendizaje constituye una de
las principales empresas de la educación contemporánea en donde se debe fijar
los pilares desde temprana edad de la vida, e incluso en la primera escuela “la
familia”. No obstante, al formalizar este proceso en la educación inicial
muchas veces las instituciones se desligan de su responsabilidad mostrando una
“careta” que fija a este nivel una etiqueta de exclusivo para la familia y la realidad
educativa debe ser otra; pues, es el docente quien tiene en sus manos
soluciones basadas en todos los pilares ya señalados.
En este sentido, el valor de cada uno de los
aspectos mencionados en el párrafo anterior es importante, porque se ajusta a
la estructura de la formación tomando en cuenta la Educación Inicial que está
orientada hacia el desarrollo de la persona (ser social) y la universalización
de los derechos fundamentales, desde una perspectiva humanista todo esto
apoyado en el artículo 102, de la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela (1999) que reza “La Educación es un derecho humano y un deber social
fundamental…. ” (p.26)
El valor de esta cita invita al fortalecimiento del
niño, niña en este nivel motivando su formación hacia el desarrollo psíquico,
cognitivo, corporal y emocional; en el cual este último ha sido desfasado por
muchos docentes de hoy, que sólo tienen como tarea formar y no mostrar la
afectividad necesaria para cubrir este aspecto o enclaustran el proceso
educativo en base a unas líneas de formación muy conductista que invitan al
aprendizaje rígido sin incorporar nuevas técnicas que innoven y le den
aplicabilidad constructivista al cambio.
Además de todo lo citado con anterioridad, dentro de
la planificación de la jornada diaria de trabajo en educación inicial muchas
veces no se incorpora por ejemplo actividades que estimulen la afectividad
trayendo consecuencias en la expresividad, identidad personal, conflictos
emocionales, insatisfacción propia por el medio que le rodea; en sí, un sinfín
de aspectos que involucran estas condicionantes y que explora la tesis de
Piaget citado por García (2002), quién contribuyó en este campo teorías que
inciden en que a través de “la afectividad se permite reconocer cada uno de los
momentos del desarrollo que facilitan la organización de la personalidad del
niño, niña”. (p.26)
Este planteamiento ha generado en los últimos años
problemáticas debido al desfase de la educación que convergen en la disociación
del perfil del docente y la falta de integración en los basamentos teóricos que
fundamentan las teorías del currículo de educación inicial; debido a que no ha
reconocido la importancia de inclusión de la creatividad como medio de
fortalecimiento para el desarrollo integral del hombre.
Todo esto ha causado problemáticas en la formación
de un estándar promedio de educando que concentre sus actividades en medios
mecánicos de sustentación académica que limita la investigación, exploración de
nuevos contenidos, desarrollo de distintos métodos de estudios, protagonización
del valor humano del arte para la vida y su efecto sobre el crecimiento personal;
limitando el pensamiento creativo, la innovación y exploración de sus vivencias
a través de nuevos medios de formación trayendo consecuencias que van desde la
apatía por el estudio de los contenidos, incongruencias en el rendimiento
escolar, así como también carencia de asociación en el aprendizaje
significativo que promueva la motivación, iniciativa y desarrollo personal.
Situación que puede ser revertida con el uso de la
creatividad como medio de expresión artística, pues el docente como todo
individuo es potencialmente creativo, sólo que hay que encontrar el espacio que
posibilite este desarrollo; otorgando la oportunidad para operar con el
pensamiento divergente y convergente, ambos característicos del proceso
creador. Así como lo señala Logan (1980) el cual cita
El
aprendizaje en el nivel inicial se centra en fomentar la actividad lúdica como
proceso que conlleva al niño a desarrollar su potencial creativo, al desarrollo
de su capacidad perceptiva, a resolver problemas por medio de la exploración,
ensayo, descubrimiento, desarrollo del pensamiento crítico, analítico y
sintético, o sea, a participar activamente en actividades de
investigación…(p.101)
Esta cita resulta fundamental pues
nace en la idea de una educación inicial fomentada en la actividad creativa
para fundamentar el
fortalecimiento en el Desarrollo Socioemocional de los niños (as) de educación
inicial a educación primaria; en donde el docente muestre y se
responsabilice en la importancia del desarrollo de distintos potencialidades y
medio de expresión. Cabe señalar las siguientes interrogantes ¿Con el uso de la
expresión creativa el niño podrá equilibrar el desarrollo socioemocional?, ¿El
docente de hoy día utiliza la expresión artística como medio de fortalecimiento
en las potencialidades del dicente?, y para finalizar no menos importante que
las anteriores ¿La Expresión Artística como forma de expresión personal brinda
fortalecimiento emocional al niño, niña de Educación Inicial a Educación Primaria?;
bajo estas interrogantes y en base al
planteamiento aquí señalado converge todo el contexto aquí expuesto, el cual
tiene como propósito el estudio de los elementos señalados como anterioridad.
OBJETIVOS
DE LA INVESTIGACIÓN
Objetivo
General
Analizar la expresión artística
como medio de fortalecimiento en el Desarrollo Socioemocional de los niños (as)
de educación inicial a educación primaria.
Objetivo
Específico
1. Describir
cuales son las técnicas que utiliza el docente de hoy para fortalecer la
expresión en las potencialidades del niño, niña de educación inicial.
2. Estudiar
la importancia de la Expresión Artística como medio de fortalecimiento para el
desarrollo del desarrollo socioemocional en los niños, niñas de educación
inicial a educación primaria.
Referencias
Boden, M. (1994) La mente creativa.
Mitos y mecanismos. Ediciones Gedisa. Barcelona, España
Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela (1999)
Currículo Básico Nacional de
Educación Inicial (2005) Ministerio del Poder Popular para la Educación. Caracas-
Venezuela.
Cottle, T. (1981) Descubrimiento asimismo a través del Juego
Creativo. Ediciones Paidos Educador. Barcelona
Delors, J (1994). “Los Cuatro pilares de la Educación”, un
tesoro por consolidar. Ediciones IESA. Caracas- Venezuela.
Frankl, V. (2000) Ante el vacío existencial. Editorial
Herder. Barcelona
García, H (20025) Encuentros con las teorías de Piaget. [Documento
en línea]. Disponible en: http://www.sappiens.com/Educadores.
[Consulta de Julio de 2014].
González, B (2005) Ideas Creativas.
Ediciones IESA. Caracas- Venezuela.
Logan, L (1980). Estrategias para
una enseñanza Creativa. Ediciones Oikos-tau. Barcelona.
El docente es orientador en los procesos de aprendizaje utilizando métodos de enseñanza en este sentido debemos ser facilitadores funcionales para la expresión creativa explotando las fortalezas y habilidades del niño (a) haciendo frente a las debilidades con técnicas que permitan ver las riquezas cognitivas que tiene el discente y que este explore a su vez un equilibrio emocional para su desarrollo personal.
ResponderEliminarLa expresión artística como medio de fortalecimiento de desarrollo emocional en los niños y niñas permiten la expresión natural de sus potencialidades formando en los mismos un auto concepto personal equilibrado a la importancia del niño (a) como ser social y generador de cambios que comienzan desde el mismo.
ResponderEliminarEn otras palabras se dice también que la expresión artística es muy beneficiosa para los niños(as) porque:
ResponderEliminarAyuda en el desarrollo de su individualidad y de su autoestima
Fomenta una personalidad creativa e inventiva.
Desarrolla habilidades para resolución de problemas.
Organiza sus ideas.
Estimula su comunicación. La hace más efectiva.
Favorece la expresión, la percepción, y la organización.
Ejercita la creatividad.
Favorece la expresión de los sentimientos.
Serena y tranquiliza.
Excelente recopilación de información... Chicas las felicito
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